La lista oficial de especies invasoras preocupantes publicada por Bruselas excluye no solo a la trucha arco íris y a la carpa, sino a otras especies como black-bass y el siluro. Esta publicación viene a dejar sin efecto la sentencia del Tribunal Supremo sobre un recurso de Ecologistas en Acción que suponía un duro contratiempo para pescadores, piscicultores e industrias y empresas turísticas y deportivas, entre ellas las 108 piscifactorías existentes en España. El impacto económico se cuantifica al menos en 2.000 puestos de trabajo y 500 millones de Euros.

La Plataforma en Defensa de la Pesca exigirá de inmediato que se modifique la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y Biodiversidad de acuerdo con las directrices europeas. El problema estriba en que el actual gobierno está en funciones y habría que esperar a la formación del nuevo ejecutivo. En todo caso habrá tiempo de analizar con mayor detalle esta noticia de gran interés para los aficionados.